Gran tarde de toros la ofrecida por Victorino en Pozoblanco. Con el que abría plaza, un toro que se quedaba corto y desconfiado, El Fundi no llegó a entenderse en ningún momento, lo que no agradó en los tendidos, que pitaron al torero al final de la faena. El matador sacó la raza en el cuarto y dio muestras de su torería, dejando momentos brillantes, sobre todo sobre la diestra. Fue premiado con un apéndice.
Por su parte, Juan José Padilla, dispuesto con el capote y bien en banderillas (tercio que compartió con Ferrera), dejó buenos detalles con el cuarto, que fueron recompensados con una vuelta tras petición, con el enfado del matador. En su segundo, un toro buenísimo, “el ciclón” se mostró muy templado, dibujando derechazos largos, bien llevados muy abajo o mirando a los tendidos. Tras una gran estocada entera paseó las dos orejas.
En el tercero, Antonio Ferrera se encontró con el mejor toro hasta el momento. Le instrumentó una buena faena, sobre todo por el pitón derecho, mostrándose muy templado. Sólo le faltó matarlo bien para llevarse algo más que la ovación recibió. Con el que cerraba plaza, el mejor de la tarde (fue premiado con la vuelta al ruedo), el extremeño dejó los mejores momentos de la corrida, con muy buenos naturales y muletazos de gran belleza al final de su labor. Tras entrar a matar, el toro ya con la espada le dio un arreón en la rodilla, lo que no impidió salir a hombros a un Ferrera que le cortó dos orejas.
Ferrera cortó las dos orejas al que cerraba plaza. El Fundi tiró de raza ante su segundo. Padilla se mostró una vez más muy templado. (Foto: F. Arroyo)
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